Una mañana te despiertas, ves todo al revés. "Hoy no es mi día", piensas,"Como de costumbre me va a salir todo mal". Te duchas para ir de nuevo al instituto, de nuevo a esa "cárcel" a la que asistes 5 días a la semana y 6 horas al día. Te peinas, desayunas, te vistes, te aseas.. sin ganas. Sin ganas de nada. Sin ganas de sonreír frente al espejo, al espejo que cada día escuchas decirte <<No eres la reina del mundo>>. Al espejo en el que todos los días sonríes falsamente, el que te muestra tus errores, pero que aún sigues cometiendo. Andas sin ganas, pesadamente sobre tus cargadas piernas, sin ganas de afrontar la vida. Saludas a tus amigos, te ven que no estás en tus mejores momentos y que para ayudarte creen que con un "Nadie dijo que fuera fácil" todo se pasa, y que con eso ya serás feliz durante el día entero. Ellos no saben lo que te hace feliz. Ellos no saben por lo que te levantas cada día e intentas seguir con tu vida, no saben que es lo que te hace seguir adelante, no saben quién es la razón de tus posibles sonrisas. Si, es él. Él es una de las mejores personas que he conocido nunca, la cosa más preciada y más bonita que tengo, el que con hablar 5 minutos con él hace que las 24 horas del día sea lo suficientemente feliz como para dormirme con una sonrisa. Él tampoco lo sabe, por desgracia. No sabe que es la razón de mi sonrisa, por el que cada día lucho hasta dejarme la vida, que poco a poco se desgasta cuando ni se acuerda de que existes. No se molesta por verte sonreír, no se molesta por tu felicidad, solo por la suya. Y no es que él sea egoísta, yo le comprendo, si no que quiere vivir la vida al 100 % y no dejar ni un solo segundo de sonreír, porque llegará su día y dejará atrás todo lo que a vivido, solo o en compañía. 
Pero llegas a clase, y le buscas. No le encuentras, una sonrisa triste aparece en tu cara, no se borra. Sonríes tristemente y una lágrima amarga se desborda por tu mejilla. Definitivamente, hoy no es tu día. Ya se te ha amargado las 24 horas que te quedan. Piensa en que sería mejor no haber nacido, morirte en ese instante. Todos te preguntan que te pasa, todos. Pero en realidad no les importa, solo es para ser unos interesados. A nadie le importas, te das cuenta. Piensas que este no es tu planeta. Que sigues en tu cama durmiendo. Ojalá.De repente apareces por la puerta y mi cara cambia completamente,hasta que la veo a ella de tu mano y que os despedís con un beso,veo que el mundo se me cae encima,que me quedo sin oxígeno y empiezo a llorar y nadie me puede calmar.